LA CANASTA DE LAS FRUTAS

Las disputas entre frutas no es normal cuando un chile jalapeño se faja su sombrero y amartilla su pistola...y menos normal que un par de tunas ladinas lo enreden todo con su peculiar forma de hablar."  
                                   

Sobre la mesa  de la cocina hay una canasta de frutas y legumbres,costumbre de la señora cocinera de mezclar cuando va al mercado y las olvida ahí. Sí nos asomamos veremos gran variedad, unas frescas, maduras, bueno... algunas. Porque la verdad hay unas que están verdes aún. 

Tal es el caso de unas peras y manzanas. Una enorme sandía, dicho sea de paso ocupa mucho espacio, abre los ojos.

__¡Ahumm! ¿A que hora llega la comida?

Una naranja que tiene la cara con huellas de varicela, réplica.

__Mírala tù..Esta cree que todavía esta en el trópico de holgazana. Por eso esta tan gorda digo yo.

De pronto todo mundo comienza a opinar sin ser invitados. Un grupo de limones verdes todavía con algunas hojas del árbol se acomodan como si fuera función de cine. Un par de fresas trata de apartarse a un rincón de la canasta; dicen que son de abolengo, de una familia bien de Guanajuato.

__Te dije hermana, que nos hubiéramos ido en la canasta de aquella señora elegante no de esta, que traìa todavía las chanclas y no sè que cosa en la cara.

Era una mascarilla__se oye una voz__de aguacate.

¡Ahggg!__grita un chaparrito negrito con barritos en todo el cuerpo y se desmaya. Entonces dice un  limoncito, divertido
__Es un aguacate Has...ya le mataron a su abuela, o tío, o sobrino, o...__Cállate ya__dice su compañero.

Un melón se abre paso entre la fruta. Lleva un bastoncillo y un sombrero de hongo__¡Veamos que pasa aquí..!

Porqué tanto escándalo, en el Sùper donde estaba

no había tanto desorden; todo era más limpio y disciplinado, caray.

Las naranjas cuchichean__Se cree que viene de Francia, cuando lo acaban de comprar en el tianguis.

Las que permanecen calladas, mirando todo son las tunas verdes originarias de la Milpa Alta. Como son muy mexicanas,traen sus huaraches calados y un pantaloncito hasta la rodilla. Una se aproxima muy ladina.

__Yo creyo mesmamente sus mercedes, que estando todos en este mesmo lugar, naiden nos mirará o mejor dicho, nos "pelará".

¿Que dijo este muchacho playero?__ pregunta la manzana.

Y contesta un limoncito.

__Dijo que todos nos llamamos Meche, y que aquí amontonados oliéndonos los...naiden, ni quien se asome a comernos. Porque estamos revueltos como huevos y se mezclan los olores. La sandía huele a rábano, el jitomate a melón.. Y asì hasta que se me acaba la saliva. Mejor nos vamos yendo los vegetales a otra canasta. 

En eso se oye una voz muy norteña al mismo tiempo que aparece un Chile jalapeño con botas, bigote y un sombrero de ala ancha hecho de cebolla.

__¡Yo no estoy de acuerdo en abandonar mi humilde morada!Por la sencilla razón de que aquí en la cocina nomàs hay una canasta. Los que se quieran ir, pos será a un Toperwere...Y me temo que los llevarán dentro del refrigerador.

La canasta se llena de expectación. Algunas frutas hablan en voz baja, se miran. Otras de plano se sientan desmoralizadas. Habla la sandía__Mire, mi querido Chile de árbol...

__¡Jalapeño señora, Jalapeño! ¡Que aunque no soy de Jalapa en el norte se hacen unas salsas, que valgame Dios! ¡Nomàs los machos me comen!

__Bueno, como sea...Somos muchas frutas, pero también hay mucha legumbre, así que propongo nos dividamos por igual y formemos grupos mixtos para ir en busca de otra canasta.

__Ta bueno, Yo haré los grupos mixiotes pa que sea parejo.

__Mixtos señor jalapeño, se dice mixtos.

__¡Pos como sea la cosa!

Y a continuación agrupa a dos naranjas con tres zanahorias, un plátano con los limoncitos, las tunas con una cebolla y un jitomate, y finalmente un durazno, una papa y una papaya. Los demás permanecerán en la canasta. El Chile se faja el cinturón, se acerca a una zanahoria.

__Será mejor que se corte las greñas o al primer jalón se lo llevan derechito a la cazuela, mi amigo.

__¡Pero es que... es la moda en Estados Unidos!

__¡Que moda ni que mis semillas! ¡Pos de donde viene este huerco,que alguien me diga!

Una naranja dice.

__Es zanahoria de exportación, viene de los Ángeles.

Iracundo el norteño saca su pistola.

__¡A los ángeles lo voy a mandar..pero en el cielo, sí no se rapa ahorita mismo!

Finalmente los limoncitos,que parecen hermanos gemelos, se alisan la hoja que tienen sobre la cabeza. El plátano que los acompaña es grande y muy amarillo, sin ninguna mancha en su cascara. Tiene su carácter, pues allá en Puebla, fue Policía. Los tres salen de la canasta avanzando por la mesa; evaden todos los trastes y una canastilla de tortilla que hay, hasta que llegan a la orilla.

¡Sopas, manito!___exclama un limón___¡esta altísimo, si hubiera sabido me traigo una rama de limonero!

El plátano dice sereno.

__Se ve que son limones de huerta. Para esto ocuparemos equipo de Rappel.

__¡Huy, sí tù! Este se cree MELÓN BOND.

__Mira chaparro cuerpo de albóndiga, esta es una misión en que a nosotros toca hacer lo más importante. Llegar a la sala en donde según los informes hay una canasta. Y para llegar allá, primero debemos bajar y...

__Ta bueno, ta bueno.

El otro limón dice.

__Oye, ¿Y de donde conseguimos el equipo de Rafael?

__No sè... El único que conozco es uno que canta.

El plátano mueve su cabeza, desilusionado.

__Mejor me hubieran asignado a las tunas.

¡Huy...y luego esos!___exclaman al mismo tiempo.

La susodichas en compañía de los vegetales tiene como comisión sacar a quienes estuvieran dentro del refrigerador.Por fortuna queda frente a la mesa, pero hay que salvar un abismo; el jitomate se asoma, pero como esta redondo, casi se va de regalo. Una tuna le toma a  tiempo del short.

__Abuzado compadrito, que aquí ti haces càtsu.

__Es que...no me pude detener.

La otra tuna se burla.__Pos mesmamente como te ibas a ditiner, si estas re boludo.

La cebolla siempre con los ojos irritados recomienda.

__Lo mejor será tender un puente.

__Pos lo único que tenemos son las espinas mías y de mi compadre, la gordura del boludito, y astè.

__No puedo cree que no tengan ingenio ¡Busquen algo para pasar al refrigerador!

__¡Nomas no me grite, cebollita de cambray! Voy a buscar algo pa que no me este friegue y friegue. Orita vengo.

Se aleja y descubre al gato de la familia entrando por la puerta posterior de la cocina.

__¡El micifuz se metió!

Se quita un huarache y a punto de aventárselo recapacita.

__ No pos sí... ya merito lo voy a descalabrar con mi huarachote.

Presto se regresa dando gritos.

__¡El micifuz, el micifuz!

El Jitomate lo tranquiliza porque no le entiende nada.

__A ver tù, dime¿Que quiere decir este?

__ Que se jue la luz.

__¡No! ¡Que se metió el gato a la cocina! ¡Ay, compadre...es astè re bruto!

 Bueno, bueno, ___ dice el Gordito que ya se cree el jefe.

__ Mientras no nos vea, no pasa nada. Pero debemos estar prevenidos, sugiero que las tunas afilen sus espinas, y la cebolla se quite unas cuantas capas.

La cebolla abre mucho los ojos, no está dispuesta a desnudarse.

__ Señor mío, tengo pudor por si no lo sabe.

__Pos el minino se lo va a destripar con todo y su pudor. 

Eso sí, va a quedar listo pa echarlo a los frijolitos negros.

Y se carcajean tan fuerte que el gato los oye. Se escurre arriba de la mesa y una tuna lo ve.

__ Compadre no voltiè, hay viene el minino. Hágase más tonto que di costumbre.

Caen inmóviles sobre la mesa mientras los otros logran escabullirse apenas; detrás de un tazón de  mermelada encuentran refugio. Las tunas se hacen como muertas, pero algo viene a complicar las cosas. Una mosca revolotea un par de veces queriendo pararse encima de ella, y lo hace. La tuna levanta espantandola ruidosamente con su sombrero de paja.

__¡Hucha, hucha, condenada jija del maiz! ¡Ti queres almorzar estos juguitos que el nopal me dio!

Pero olvida que tiene una gran compañía. Paso a paso sin dejar de mirar al gato, camina hacía un plato de comida.

__ Condenado mata ratones, nomàs mi tocas...

Y dicho y hecho, el gato lanza un zarpazo y este se espina. 

Se va maullando de dolor.

__ Di algo sirve que no me quitaran las espinas allá en la central di abasto.

Se reúnen de nuevo. La cebolla se tapa el trasero.

__¿Qué ti pasó cebollòn?

__ El gato me quiso atrapar...alcanzò a quitar una capa de mi elegante indumentaria.

¡Ja,ja,ja, le jaló los calzones!___ ríe el jitomate, y entonces se escucha un ¡purrr! 

Todos callan por un momento, hasta que dice la cebolla.

__No sabía que los jitomates tuvieran gases. Revisate gordito, tal vez se te salio el jugo.

__Ta gueno de tanta palabrería, a lo que te truje chencha...

Se asoman viendo que donde debían pasar al refri, el gato al saltar deja mal apoyada una cacerola; esto sirve como puente solo que, cada vez que pisan el traste se mueve.

 La tuna comienza a rezar cada vez que mira abajo.

__ Santo Nopal de mi guarda...

Mira abajo de nuevo.

__¡Ay Tata nuestro que estás en el Cerro, ruega por tus tunas, no nos desampares ni de nochi, y a ninguna hora...!

Mientras en otro lado, las cosas no van del todo bien, porque estando ya en el suelo, el plátano y compañía se pierden entre el sofá y una enorme casa de muñecas. Y los limones, que a todo le encuentran el lado divertido, se acercan a la casita rosa, debidamente amueblada. Uno toca a la puerta.

__No hay nadie en casa.

__ Finjamos que somos cobradores...¡Señora, si no paga de inmediato, se larga con todo y tiliches!

__¡Entremos compañero, y embarguemos!

__¡Sí, entremos y embriaguemonos!

__¡No, así no es...! Mejor vamos a ver que hay en el segundo piso.

Mientras su jefazo los busca por todas partes.

__¿Dónde se habrán metido estos buenos para nada?

De pronto levanta la vista descubriendo a uno parado en una ventana. Grita que baje,mientras el otro comienza a recitar.

__¿No es asì hermosa mía que en esta orilla, el aire se respira mejor? ¿Que no te gustan las quesadillas, porque tienen coliflor?

Va a seguir pero vio al plátano ___¡El jefazo nos llama!

se deslizan por un cordón hasta donde está el ex- policía. 

Este, a punto de perder la paciencia les llama la atención.

__¡Dejen de hacer tonterías, esto es serio! Ya encontré el camino para llegar a la mesa de costura. Llevaremos la canasta a la cocina.

__ Oiga, jefazo...¿Yo podría ser como Melón Bond?

__¿Estás borracho, acaso?

__¿Que, es un requisito?

El pobre individuo amarillo menea la sesera.

__ Me volveré loco si no terminamos pronto¡Ya no los soporto!

AL Poco rato se ve una canasta deslizarse lenta sobre la alfombra boca abajo. Dentro van cargando cual cruz en la vía dolorosa los chaparros y su jefazo; el cansancio es notorio en los semblantes de los amigos verdes.

__ Jefazo... me estoy volviendo limón chupado, ya me cansé, jefazo...

__ Esta bien...descansemos un poco.

Pero nadie contaba con que la cocinera llegara.

__¡Qué tiradero es esta cocina! ¡Ay, mis legumbres están tiradas! De seguro se metió ese condenado gato.

Levanta la canasta, la mira unos segundos, cuando descubre otra sobre la mesa.

__ Ya tiene varios días que no separo los comestibles. Se van a pudrir más pronto...

En un dos por tres separa frutas de las verduras en las dos canastas, limpia el tiradero dejando la mesa impecable. Luego trapea el piso; al terminar cuelga el delantal.

__ Es hora de ir a casa de la Güera Fernandez, a mi juego de canasta Uruguaya. Ya acabé mi quehacer.

De la canasta de legumbres se deja ver el Chile Jalapeño.

__¡Qué bien, que bien! Lo que nos hubiera ahorrado esta huerca, si acomoda todo antes.

Aunque todavía falta que traigan a los refrigeraos. Asì estamos bien pues, cada oveja en su corral.

Del otro lado asoma una fresa bien fresona.

__ Que dice Don melón o sea nuestro delegado, que le manden sus cosas ¿Ves?

__ Pos nomàs hay dos calzonsotes, un bastón y unas chanclas de bosboni. Y díganle a ese señor que venga por ellos, si quiere. Aquí nadie le va pegar las pulgas, y que no somos sus criados.

__ Ash...pero que corriente eres, o sea...

__¡O sea que si no se calla el hocico, voy hacer mermelada!

El Chile se vuelve a  sus compañeros de canasta.

__ Estos ex- compañeros del infortunio, por creer que son del cuerno...

De Alcurnia, señor ___ corrige un frijolito diminuto sentado en una lechuga.

__¡Pos será el sereno, pero no somos menos que nadien ni le servimos a gentes ingratas!

Las voces de aprobación se elevan dentro de la canasta, en tanto en la otra, hay algunos como las naranjas, las manzanas y unos capulines que no están de acuerdo en la naciente gresca. Estos últimos dicen.

__ Nosotros pensamos que no debemos pelear, porque en cualquier momento nos engullen.

¿Y estos prietos?___ pregunta una guayaba intrigada. La Pera muy culta responde.

__ Son frutitas silvestres nacidas del arrabal. No es por discriminarlos, pero a ustedes  nadie se los come.

No vamos _dice el melón ___a mandar a ninguna fruta al fondo de la canasta, estamos ante la enemistad de los vecinos verduleros, y seguramente nos harán pasar una rabieta. Debemos estar unidos ante todo. La gran ventaja es que no está la cocinera¿alguien sabe a donde fue?

Yo escuché ___ dice presurosa una naranja que iba a Uruguay por una canasta.

__ Entonces ya no regresa. Formaremos una comisiòn para que vaya a hablar con los vecinos.

Más tarde van por la mesa caminando llevando

un banderín blanco una naranja, el plátano y dos capulines. Se detienen a unos metros de su objetivo;

el Chile asoma acompañado de una papa y un espárrago.

__¡Que mondrigos quieren!

Necesitamos hablar __ dice la naranja.

__¡Hablar ni que la enchilada!¡Cuando alguien hace enojar a un chile jalapeño, que se atenga a las consecuencias!...¿Que quieren?

__ Venimos en son de paz

__ Desembuchen tripas, que el estómago está revuelto.

Al ver sus caras de What, dice.

__¡Que digan a qué vinieron, pues!

Van a abrir la boca cuando aparecen en la lejanía unas figuras jalando un objeto grandisimo. Son los que rescataron a los presos del refrigerador; solo que los llevan dentro de un topper. Al llegar, salta de la canasta una papa bien musculosa.

__ Yo le quito la tapa, para eso soy bien papa.

Después ayudan a sacar a una serie de legumbres congeladas, que parecen vienen del polo norte, algunas hasta traen ropa de invierno, una berenjena de plano parece esquimal.

Bienvenidos mondaos___dice el chile __ estuvieron mucho tiempo por aquellos lugares. No me digan que hasta vieron osos y pinguinos...No, mejor no digan, ya me dio frío en las semillas. Pero salten a la canasta, los estamos esperando con una pequeña fiestecita, nomàs no se fijen, nos costó trabajo traer cohetes y bebidas, pero vale la pena ¡pasen, pasen!

Luego se vuelve a la comitiva de frutas.

__ Díganle a su dizque delegado, que se lave lo redondo que es pa que se venga a la pachanga... digo, si quiere. Y pos, los demás pueden venir cuantos quieran.

La comitiva sale disparada al otro lado de la mesa llevando el recado. La cebolla y el jitomate no se van ignorando lo que pasa.

Durante los preparativos sucede que a la cebolla se le cae la última capa que trae desprendida. Roja por la pena acepta una hoja de lechuga que le da el chile.

__ Tápese mi amigo, aquí hay muchos frijolitos recién salidos de la bolsa y no deben ver sus cueros.

__No son cueros, son capas de cebolla.

__ Está visto que aquí nadien es letrao como yo, que estudié en la Universidà verde de guajillo. Nadien aprecia mi talento.

Los emisarios llegan echando chispas por los zapatos ante el señor melón; lo enteran del mensaje, este da una vuelta...porque más no puede. Se rasca el bigote pensando, y al fin dice.

__ Creo que llevamos demasiado lejos este asunto. Después de todo somos vecinos, solo nos separa el tortillero; vamos pues, prepárense con sus mejores galas...¡Iremos a la fiesta!

Las tunas se cruzan de brazos.

__Pos ansina nos vamos, mi mejor tiliche son mis huaraches.

Pues yo iré _dice la sandía, presumiendo con un elegante vestido de Calabacita Dior.

Muchos entusiasmados se aprestan a arreglarse, entre ellos las naranjas con pomposos vestidos, las manzanas con colorete en las mejillas, el mamey presumiendo su buen físico... Por eso dicen que está muy mamey. 

Después de darse la mano el melón y el chile, este último entrega sus cosas, y asì da comienzo la fiesta.

__ Déjeme darle un consejo amigo melón... estas pantuflas son viejas, yo me acabo de comprar unas de los "Transformas."

El viejo melón le corrige atento.

__"Transformers" los conozco,también veo la tele.

__ Como sea, pues. Me sirven porque se TRANS-FOR- MAN, en chanclas y en balas.

__¿Como esta eso, amigo Jalapeño?

__ Pos cuando maúlla el gato, le aviento mi chancla.

__¿Y eso que?

__ Se convierte en un proyectil asesino.

El melón se ríe abiertamente mientras el segundo se mantiene serio.

__Pos no le encuentro la gracia, lo malo es nunca le atino al condenado peludo.

En otro extremo las tunas hacen de las suyas cada una por su lado. Una se jala por el brazo a  una fresita, ya entrado en copas.

__¡Ay, naco de nacos, o sea... que tù no puedes aspirar a bailar conmigo!

__ Ni te espines nopalita de mi milpa, ya muchas chancludas quisieran guarachear con yo. Pero no le aunque, de todos modos nos danzamos esta milodía.

Y que la revolotea por todas partes como licuadora, aunque se tropieza el pobre con sus propios huarachotes. Los limones en tanto, vestidos con un sombrerito de marinero, se suben en lo alto de un espagueti y de ahí lanzan a todo el mundo bolas de confeti, según ellos muy felices pero a la hora de echar cohetes al cielo, dirigen uno al suelo yéndose a estrellar en un canastòn de empanadas con todo y la señora pera.

Las risa los doblan a tal grado que uno cae dentro del ponche. La música cambia de pronto, se oye una polka; algunos se animan, y la otra tuna que esta muy ebria quiere zapatear como el jalapeño, pero un huarache sale disparado hasta que se estrella en la cara del plátano.

Y la fiesta sigue con mucho entusiasmo,corre la bebida, el baile, la comida y los papelitos de colores. Sin embargo al cabo de una horas los desfiguros se hacen notar en los beodos.

La tuna sin huarache abraza al mamey con demasiada confianza.

__Ni ti creas ta juerte tù. ti apesto... digo, ti apuesto, que ti gano a las juercitas.

__No digas tonterías amigo mio, entrañable camarada de parranda...Yo hago tres horas diarias de ejercicio.

__¡Achis,achis! ¿A poco di veritas tienes mucha masa de maiz?__A las pruebas me remito, pariente de la penca.

__¡Ora! eso se oyó ri feo.

Y brindan con vinito de uva madura.

__¡Hic,hic! mi compaye...nos estamos echando al cogote ¡hic! a las uvas...¡Somos caníbales!

Después de las 2 de la mañana, todo queda envuelto en un silencio, roto sólo por los ronquidos desafinados, de los borrachos. Y como el destino a todos llega, por la mañanita la cocinera tiene que hacer el almuerzo y ...¡No hay para hacer ni un triste huevo! Todas las frutas y verduras, desde los frijolitos hasta las ciruelas pasa se fugaron de la cocina quién sabe a donde.

Tal vez a buscar un lugar donde nadie les pase cuchillo; lo cierto es que la señora de la casa va a tener que pensar qué hacer; ni modo asì es la vida. La vida de una canasta de frutas.La recomendación es que cuando comas fruta, primero fíjate bien. No vaya siendo que tiene huaraches y cara de limoncito, o se cree muy mamey, o de plano salte echando balazo. 

Sí no hay nada de eso, te puedes comer tu fruta.

                                                       Fin

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